Por fin llegó el domingo 27 y hemos ido de excursión al Zoo-Acuarium de Madrid. La verdad es que había que levantarse muy pronto, yo a las 5 de la mañana, que pereza. Pero una vez en el autobús, ¡que ilusión!, mi primera excursión, el único miedo, las 4 horas y media de viaje, pero nos lo pasamos bien, espero que los demás también.
Iba con la idea que me habían contado de un zoológico donde había tigres, leones, elefantes, monos y el gorila. Pero nos encontramos un zoo totalmente diferente, más diverso, con cientos de espieces, y más educativo. Cuando entramos fuimos a ver el espectáculo del delfinario. Que bonitos eran los delfines, ¡y que saltos daban!, es sorprendente cómo actúan. De ahí fuimos al Aquarium. Peces de muchos colores, otros muy raros, y unos "peasos" tiburones que impresionan.
Si impresionantes son los habitantes marinos, más impresionantes son los reptiles, lagartos, serpientes, tarántulas, hasta un caimán, y los de naturaleza misteriosa, ranas multicolores, insectos con formas para camuflarse con el entorno.
Comer, descansar en la multitud de zonas de descanso como comederos, picnic o en los mismos jardines sentados en el césped, como hicimos nosotros, y continuar con la visita.
Animales impresionantes como el rinoceronte blanco, el elefante asiático, leones y el hermoso tigre de Bengala blanco, una auténtica belleza, los monos con sus bebés, incluso le dí de comer de mi mano a una jirafa Masai.
Lo único que no entendí es cómo se tiene que sentir un pingüino de Magallanes a 30 grados a la sombra.
En definitiva, fue imposible aburrirnos, ya que cuales de los animales era más asombroso, es increíble la gran variedad de especies que hay, algunas sumamente extrañas y curiosas.
Y en resumen, una excursión entretenida, divertida y bien organizada, nada que objetar a sus organizadores.
Cuando era pequeña mis padres me llevaron a ver el zoo y los recuerdos que tengo de él a lo que ví este día no se parecen en nada.Fue como volver a descubrir a los animales y al lugar.FANTASTICO.
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Cuando era pequeña mis padres me llevaron a ver el zoo y los recuerdos que tengo de él a lo que ví este día no se parecen en nada.Fue como volver a descubrir a los animales y al lugar.FANTASTICO.
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