Ahora que se acerca el periodo vacacional y para la gran mayoría el periodo de baño voy a aprovechar la ocasión para recordar unos conceptos a tener cuenta durante este verano.
¿Sabías que... existe una normativa estricta que deben cumplir las piscinas para evitar los accidentes?
En una reunión celebrada en Ruán se establecieron las medidas legales para prevención de accidentes infantiles en piscinas públicas y privadas. Allí se estableció que desde enero de 2006 todas las piscinas deben equiparse con dispositivos de seguridad:
- Una barrera de protección rígida o elástica de una altura de 1,10 m. provista de una puerta de cierre automático.
- Una alarma sonora colocada en la superficie del agua o alrededor de la piscina.
- Una lona cerrando la piscina.
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Como normas complementarias se recomienda:
- asignar un adulto a cada niño.
- tener flotadores adaptados a la edad del niño/a.
- tener al lado de la piscina una vara larga, una boya y un teléfono para solicitar socorro.
- después del baño la piscina debe quedar libre de objetos y juguetes y convenientemente cerrada.
- aprender a nadar desde los cuatro años.
- formarse en primeros auxilios.
- mantener los productos de tratamiento del agua fuera del alcance de los niños.
Quizá con estas medidas se puedan evitar cualquier peligro que pueda amargar un buen día de baño.
Joaquin Callabed Carracedo. Director del Club de Pediatría Social
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